Las cookies de toda la vida

Cookies de chocolate con leche y avellanas


Estas son las cookies de toda la vida. De la mía, quiero decir. Aprendí a prepararlas a los 18 años (junto con unos brownies que quitan el hipo) gracias a una amiga que me enseñó en su casa y me dejó generosamente las recetas.
Son las galletas con las que me animé a encender por vez primera el horno, ensuciar la cocina sin pensar en la pereza que da luego recogerla, mirar embelesada através del cristal de la puerta del horno, las mismas con las que hice amistades, agradecí favores y con las que comencé a conquistar al que hoy es mi marido. ¡Jeje!
Fíjate si confío en la receta, el resultado y el sabor que tienen, que las usé para ligar. ¡Jajaja! En serio. Son fantásticas. No son preciosas, pero son deliciosas.
Y les agradezco mucho mucho que me ayudaran en mis propósitos pero también que esta sea una de las primeras recetas que hice mía transformando y adaptando a mis gustos y que me llevaran -tras unos cuantos años- (nunca se dice cuántos, aunque tampoco soy tan mayor) a estudiar pastelería formalmente. Despertaron mi interés por los dulces caseros, por hacer algo con cariño y por compartir.
¡Me he puesto cursi! Lo siento. ¡Vamos al lío!

Galletas de chocolate y avellanas en frasco de cristal


Cookies de chocolate con leche y avellanas:

Para 50-54 galletitas o 25 galletas:

Ingredientes:

150 gramos de avellanas tostadas molidas (o en granillo)
150 gramos de chocolate con leche troceado en pequeños cuadrados
125 gramos de mantequilla con sal a temperatura ambiente
90 gramos de azúcar moreno
50 gramos de azúcar blanquilla
120 gramos de harina de esponja/flor (self raising)
60 gramos de harina de trigo
2 huevos L a temperatura ambiente

Elaboración:

1. Tener lista la mise en place: pesar los ingredientes, moler las avellanas, trocear el chocolate, tamizar las harinas, cuencos, bandejas y papel de horno, batidora eléctrica con pala, lengua de goma, etc.
2. Precalentar el horno a 180ºC con calor arriba y abajo. Batir la mantequilla en dados con los dos tipos de azúcar en la batidora eléctrica y con pala a velocidad media-alta durante 2 o 3 minutos; hasta que esté floja y ligera.
3. Bajar la velocidad de batido. Añadir los huevos de uno en uno. Esperar a que el primero se haya integrado a la mezcla para agregar el siguiente. Batir unos segundos a velocidad media-alta y detener el batido.
4. Agregar las dos harinas tamizadas juntas y a la misma vez las avellanas molidas y el chocolate troceado. Mezclar a mano con ayuda de una lengua de goma hasta que esté homogéneo. No es bueno sobre-batir porque la mantequilla se derrite y la masa puede hacerse correosa tras la cocción.
5. Disponer la masa en la/s bandeja/s de horno con ayuda de dos cucharillas para galletas pequeñas o con dos cucharas para galletas más grandes. Las de la foto son pequeñas. Es recomendable ponerlas separadas para que al expandirse en el horno no se peguen entre sí.

Galletitas: 5x4 en cada bandeja
6. Hornear a media altura del horno durante 17 minutos exactos. ¿Por qué 17? Con 15 minutos se obtienen galletas blandas y rubias: para comer en el acto. Con 19 minutos, galletas tostadas y crujientes; como para mojar en leche. Con 17 tendrás galletas doradas en su punto y crujientes por fuera pero suaves en su interior. Y así es como más duran sin perder su punto crujiente y del modo en que antes desaparecen de la lata también, aunque sea una contradicción. ¡Jaja!
7. Pasar las galletas aún en el papel de horno a una rejilla para que se enfríen y se corte la cocción. Una vez del todo frías conservar en una lata, recipiente hermético o frasco de cristal. En mi casa duran poco porque se acaban pronto pero reservando unas pocas he logrado comprobar que duran hasta 3 días sin reblandecerse.

Cookies de chocolate con leche y avellanas


Nota: puedes sustituir las avellanas por almendras o cacahuetes. Incluso enteros. Yo muelo las avellanas porque así se reparten mejor por la masa. Y normalmente doblo las cantidades de todos los ingredientes. Si hago sólo esta cantidad, se quedan cortas para mi tropa y/o compromisos. ¡Cuantas más mejor! :)
También el chocolate es intercambiable con un buen chocolate negro. Con blanco nunca he probado, pero seguro serían mucho más dulces al paladar.

Esta receta que comparto hoy es muy sencilla pero no por eso es de menos valor para mí. Al contrario. Si las haces, espero que las disfrutes tanto como yo y los míos. A mi marido le siguen gustando tanto como el primer día. ¡Triunfarás!

Cookies de chocolate con trozos de avellana macro


Ana.

2 comentarios:

  1. Pero que buena pinta tienen esas cookies! Me apunto la receta :D Una vez seguí una para hacer unas cookies pero me quedaron demasiado empalagosas (y mira que a mí me gusta lo dulce..), así que a ver si ahora en verano me animo a probar con la tuya ;)

    ¡Un saludo!

    Jessica

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    Respuestas
    1. No te van a defraudar. Y si no quieres moler las avellanas, no lo hagas. El acabado (estética) será diferente, con más tropezones pero también serán bonitas. Como ves no llevan mucho azúcar y más de caña que blanquilla. Si las pruebas, dime qué te parecen.
      ¡Saludos maja!

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